El proyecto surge con la idea de revalorizar la Garnacha, una de las grandes uva de la Península Ibérica. Su enólogo, Aurelio García, después de asesorar varios proyectos vitícolas en los que no tenía presencia esta uva, decide desarrollar este proyecto personal basado en la Garnacha, eligiendo la parte más alta de la Sierra de Gredos para ello, en los municipios de Navatalgordo y Villanueva de Ávila, con viñedos de más de 70 años, todos situados a más de 1.100 metros de altitud. Actualmente gestionan 5 Has. de viñedo, una colección de microparcelas muy singulares con las que conseguir el frescor y la finura que desean como sello de identidad de este vino.