Aurelio García Herraiz es un enólogo inquieto. No contento con llevar la batuta en Valquejigoso (Villamanta, Madrid) o asesorar en Lagar de Isilla (Ribera del Duero), comparte varios proyectos con su mujer Micaela Rubio, donde dan rienda sueltas a sus inquietudes más personales, centrándose en variedades locales y buscando la expresión de los suelos.
Aurelio, natural de La Alberca de Záncara (Cuenca) estudió en Ciudad Real, primero Ciencias Químicas y luego Tecnología de los Alimentos (donde se impartían asignaturas de viticultura y enología). Empezó su carrera en 2003 en Mont Reaga (Montreal del Llano, Cuenca) y después en Valquejigoso (Villamanta, Madrid).
Micaela Rubio García, que también es enóloga y de La Alberca de Záncara, ha desarrollado casi toda su carrera profesional en Ribera del Júcar (Cuenca, Castilla-La Mancha), primero en la cooperativa de Casas de Benítez (Bodega San Ginés) y luego en la de Pozoamargo (Casa Gualda).
Así que con ese origen conquense y la experiencia en la Bobal del Júcar era de esperar que sus proyectos personales se enfilaran hacia esta uva, con sus Micaela Wines. A ellos se sumó la Garnacha de Gredos en Alto Horizonte.