Son cuatro botas exclusivas seleccionadas para crianza estática
Solo muy de vez en cuando Bodegas Tradición, con casi 400 años de experiencia familiar en la crianza de vinos de Jerez, decide separar una bota de sus vinos para su crianza estática.
Para ello el capataz Pepe Blandino tiene que identificar en ellos una características singulares, únicas, que convenzan a Pepe para embotellarlos en ”añada”.
Con motivo de la celebración del 25 aniversario de la refundación de la bodega en 1998, Blandino ha seleccionado rigurosamente cuatro botas muy especiales para crear estos vinos de coleccionista, de los que hay tan solo cuatrocientas botellas de cada. Se trata de la bota nº 751 que contenía su Oloroso 1970, la bota nº 750 que contenía su Palo Cortado 1975, la bota nº 786 con su Oloroso 1975 y la bota nº785 con el Palo Cortado de 1998.
Cuatro botas seleccionadas y mimadas por Tradición y controladas por el Consejo Regulador de la DO Jerez-Xérès-Sherry cuya característica principal es que son envejecidos de forma estática, sin pasar por el sistema de solera y criaderas, manteniendo la viveza de su estilo desde el origen. Entre ellos, el equipo de Vivir el Vino pudo catar el Oloroso 1975 y el Palo Cortado 1998.
El Oloroso Tradición Añada 1975 es un oloroso de añada procedente de la bota Nº 786. Con una nariz especialmente elegante y seria, es un vino que crece poco a poco, desgranando su poderío paso a paso. De las notas más inmediatas de pastelería y avellanas tostadas del inicio, a sus notas cítricas de piel de naranja y flor de azahar, hasta el recuerdo final de anticuario y almendra . En boca es fiel reflejo de la nariz, gustándonos especialmente una acidez exuberante, con un punto a heno y dejes marinos, que te hacían salivar y te incitaban al siguiente trago.
La etiqueta reproduce el cuadro “Guardacantón” del pintor sevillano José Jiménez Aranda (1837-1903), que pertenece a la colección privada de pintura española que se exhibe parcialmente en Bodegas Tradición. Se puede conseguir en la web de la bodega por 384€.
El Palo Cortado Tradición Añada 1998 es un palo cortado de añada que destacó por sus notas de ebanistería fina y chocolates, recordándonos a ciertos aromas medicinales y un personal fondo yodado, pero sobre todo con una piel de naranja amarga y orejones muy presente. En boca es amplio, potente, con ese punto salino y amargo de la naranja que encontrábamos en la nariz.
La etiqueta reproduce el cuadro “El almuerzo” pintado en 1617-1618 por el pintor Diego Velázquez (1837-1903) y que pertenece a la colección privada de pintura española que se exhibe parcialmente en Bodegas Tradición. Se puede conseguir en la web de la bodega por 367€.
Además han puesto a la venta trescientos “sets fundacionales”, con sus etiquetas antiguas, a un precio de unos 1300 euros, solo para sus socios más especiales.