En 1950 Ramón Castaño Santa, fundador de Bodegas Castaño, empezó a elaborar los primeros vinos a granel, apostando por la uva Monastrell. Poco a poco se fueron incorporando sus tres hijos, Ramón, Juan Pedro y Daniel Castaño, a la bodega y apostando por la calidad y por la apertura a los mercados internacionales. Actualmente las labores enológicas recaen en Mariano López, con más de 30 años de experiencia en el sector.
En 2006 plantaron una viña experimental con ocho variedades de uva tinta de diferentes países como Argentina, Italia, Chile, Francia y españolas de varias denominaciones de origen. Siendo la Monastrell la base de estos vinos, las utilizan en los copuages de sus vinos.