
Por Eugenia Rubio
Al cierre de la campaña vitivinícola 2020/21, el 31 de julio pasado, el potencial de producción vitícola en nuestro país ascendía a 981.313 hectáreas, lo que supone una ligera disminución del 0,8% (es decir, de 7.966 hectáreas) con respecto a la campaña anterior. Desde la campaña 2000/01, la caída ha sido de 234.694 hectáreas, con descensos en todas las Comunidades Autónomas salvo en Cantabria, Baleares, La Rioja, Galicia, y País Vasco. La reducción en Castilla-La Mancha en ese periodo fue de 99.680 hectáreas, el 42,47% de la caída total.
Son datos recogidos en el avance del informe de potencial de producción vitícola en España, publicado por el Ministerio de Agricultura. En él recuerda que el potencial vitícola está compuesto principalmente por la superficie plantada de viñedo, así como por los antiguos derechos de plantación que todavía están en manos de productores y no se han transformado en autorizaciones, y por las autorizaciones aún no utilizadas.
El 96,37% del potencial corresponde a superficie plantada de viñedo. A 31 de julio esta ascendía a 945.770 hectáreas, con un ligero incremento del 0,14% respecto al cierre de la campaña 2019/20. El informe constata que la superficie de uva de vinificación en España se ha visto reducida en 178.663 hectáreas desde la campaña 2000/01, con los mayores recortes en Castilla-La Mancha (-43%), la Comunidad Valenciana (-11,7%), Murcia (-11,6%) y Extremadura (-8,7%). Por el contrario ha habido incrementos en otras, principalmente en La Rioja (+3%), Castilla y León (+3%) y País Vasco (+0,97%).