El bodeguero puso su impronta en Aaalto, Ossian y, en su ultima etapa con su hijo, en Sei Solo.
El pasado 8 de enero falleció Javier Zaccagnini, figura clave de la DO Ribera del Duero, de la que fuera director gerente desde 1992 hasta 1999.
Natural de Jerez de la Frontera y formado como ingeniero industrial, a pesar de no tener relación previa con el mundo del vino supo entender la Ribera como pocos y desde que toma las riendas del Consejo Regulador apostó por el potencial de la DO, poniendo el foco en la calidad del viñedo y en las características únicas de su terruño.
En 1999 comienza su etapa como bodeguero, escribiendo páginas de oro del vino español a través de Aalto con Mariano García, al que seguiría, en Rueda, el de Ossian. Sei Solo fue su último proyecto, una bodega familiar, en la que, junto con su hijo Michael, elaboró su vino ribereño soñado.
Magistral bodeguero y un hombre de gran carisma y personalidad, fue un inolvidable creador de grandes vinos que sabían escuchar a cada terruño. Desde Vivir el Vino queremos transmitir nuestro cariño y apoyo a su familia y amigos. D.E.P.