Por Eugenia Rubio
El Gobierno ha aprobado un Real Decreto con el que finaliza la modificación del sistema de autorizaciones de viñedo derivada de la reforma de la Política Agraria Común (PAC), que entró en vigor el 1 de enero. Ese último cambio extiende hasta el año 2045 el sistema de autorizaciones de plantaciones de viñedo con el fin de controlar el potencial de producción de vino.
El texto introduce cambios en el procedimiento de reparto de autorizaciones de nuevas plantaciones, entre otras cuestiones, mediante el ajuste del criterio de prioridad relativo a las pequeñas y medianas explotaciones. A partir de ahora se tendrá en cuenta solo la superficie de viñedo de la explotación, en lugar de la superficie agraria total de la explotación. Además, se modifican las puntuaciones de dicho criterio para dar prioridad a las solicitudes de medianas explotaciones vitícolas, con el objeto de favorecer a los proyectos con mayor viabilidad y perdurabilidad en el tiempo, que garanticen una mejor salida de su producción en el mercado.
La nueva legislación añade como excepción de la aplicación del sistema de autorizaciones de viñedo el establecimiento de colecciones de variedades de vid para la conservación de recursos genéticos, aunque la comercialización de la producción de estas colecciones queda expresamente prohibida. Por otro lado, se ha actualizado la lista de variedades de uva de vinificación autorizadas.