
Una calificación que atribuye a la reducción de la cosecha y al estado óptimo de maduración y sanitario de las uvas.
En su última sesión plenaria, celebrada el pasado 24 de febrero, el CRDO Somontano calificaba como “excelente” la añada 2020. La decisión se tomaba tras valorar tanto los primeros vinos de 2020 como la última vendimia, marcada por una reducción importante en la cantidad de uvas recogidas. Unas uvas que, en las 15 variedades autorizadas, llegaban a las bodegas en su óptimo grado de maduración y en un estado sanitario perfecto.
Ambas variables han dado como fruto, según destacaba José Ferrer, enólogo de las bodegas Viñas del Vero y Blecua, “vinos con mucha concentración, expresión, y personalidad. Una personalidad que se define por la nitidez de la expresión varietal. Somontano siempre elabora vinos buenos y esa base se supera esta añada con la honestidad con la que cada una de las quince variedades con las que cuenta la Denominación se refleja en cada vino”.
A estas virtudes, Jesús Astraín, enólogo de Bodega Pirineos, sumaba la “finura y elegancia que tienen, especialmente, los vinos blancos. Blancos, que este año tienen un registro más delicado, en el que destaca la frescura y la expresión, mientras que en los rosados se acentúa la fruta y, de nuevo, la frescura“.
Para Jesús Artajona, enólogo de la bodega Enate, “la abundancia de las precipitaciones caídas hasta junio y varios episodios tormentosos durante la primavera marcaban la añada 2020 con un sello más atlántico y fresco. Pese a las adversidades, nuestros vinos blancos sorprenden por sus aromas de esperanza, solidaridad e ilusión mientras que los tintos nos transmiten su fuerza, coraje y entusiasmo”. En esa misma línea, José Javier Echandi, enólogo de Bodega Sommos, destacaba que “junto con la de 2019, es una añada relativamente fresca con vinos muy vivos. Excelente para los vinos que buscamos”.
Esta es la decimocuarta ocasión en la que el Pleno otorga la calificación de “excelente” a los vinos de la DO Somontano.