La Legua es una bodega familiar que ha sido y es el lugar de reunión de la familia Fernández Escribano desde hace más de 50 años. Sus vinos se elaboran exclusivamente con uva de la finca La Legua, una propiedad familiar que dista 6 kilómetros -una legua- de Valladolid y de los pueblos de Fuensaldaña, Mucientes, Cigales y Cabezón. En 1997, tras la regeneración y replantación del viñedo de La Legua, construyeron la actual bodega sobre los pasadizos y los túneles de la antigua, tres veces centenaria.