“La industria ha sufrido cambios. Las inversiones en bodegas han favorecido una mejor calidad de los vinos. Pero el cambio más profundo, y en el que Vivir el Vino ha colaborado, ha sido la valorización de la
riqueza de nuestras zonas vitícolas. Hemos perdido complejos y empujado a grandes enólogos, variedades y vinos que estaban a punto de desaparecer”
Victoria Benavides
Enóloga y propietaria de Elías Mora