Syrah | El Grifo | DO Lanzarote |
El vino es cultura, vivencias, sentimientos y agradecimientos. Y son palabras mayores si estos últimos son para alguien como José Saramago, quien apadrinó los 225 años de El Grifo y dio pie al prólogo de “La Tonelería tradicional y los vinos de Canarias”. El vino, en su primer golpe de nariz, muestra una cálida tipicidad de zona, que nunca molesta y va marcando su trayecto, pasando a la clara presencia de fruta pequeña y notas ligeramente vegetales. Claramente mineral y de terruño, en él la barrica solo tiene la función de guardar y envolver al vino. Boca franca, algo frágil, aterciopelada en su recorrido, pero que mantiene la fruta, sumando sutiles balsámicos. De acidez contenida y tanino amable, deja un final “cálido y tranquilo”, como las noches de Lanzarote.