Por Eugenia Rubio
Reunidas recientemente en Logroño, las principales organizaciones vitivinícolas de España, Francia e Italia (productores, cooperativas y comerciantes) han pedido, en un comunicado conjunto, un “plan europeo” frente a la “grave situación” del sector.
En particular, reclaman instrumentos y un presupuesto “reforzado y flexible” para gestionar “la competitividad”, “los cambios en el sector” y “la inestabilidad de los mercados”. En relación con “la reducción del consumo a nivel internacional” y “la influencia de los movimientos anti-alcohol en las políticas públicas”, el sector reclama “un apoyo real en términos de política de promoción”. Por último, en lo que respecta al cambio climático, las organizaciones esperan apoyo tanto en investigación para la prevención y la adaptación del sector como en la gestión de las consecuencias para el viñedo.
Este grupo de organizaciones ha señalado también que preparará un documento de cara a las primeras discusiones del nuevo grupo de alto nivel sobre la política vitivinícola de la UE. Bruselas lanzó ese foro el 8 de julio y su primera reunión se programó para el 11 de septiembre
