Es un homenaje a la cultura del vino, fruto de la colaboración de la FEV y el Instituto Cervantes
El director del Instituto Cervantes, Luis García Montero, y el presidente de la FEV, Pedro Ferrer, han renovado esta mañana el legado a la cultura del vino que desde el año 2018 permanece en la Caja de las Letras de la sede del Cervantes en Madrid.
En esta ocasión, se ha depositado un vino reserva de 1991, año de fundación del Instituto Cervantes, para que continúe envejeciendo en la caja nº 1458 que lleva por nombre “Oda al vino”, en referencia al manuscrito original de la obra de Pablo Neruda que se introdujo coincidiendo con el 40º aniversario de la FEV y gracias también a la colaboración con la Fundación Vivanco.
El vino, cedido por la bodega Marqués de Riscal en representación del conjunto de las bodegas de la FEV, cuenta con una etiqueta conmemorativa precisamente de ese primer legado con el manuscrito de Neruda, y está prevista su apertura en el año 2041, coincidiendo con el 50 aniversario del propio Instituto Cervantes.