Un sello de calidad para sus vinos ribereños
La bodega ribereña Valtravieso presenta una nueva imagen de marca para sus vinos de páramo, procedentes de viñedos localizados en uno de los páramos más elevados de la DO Ribera del Duero, a 915 m de altitud.
La finca, que cuenta con varias parcelas, está segmentada según sus tipos de suelo. Reserva las zonas calizas a elaboraciones más minerales, finas y elegantes, mientras que de las zonas con vetas más arcillosas obtiene vinos con mayor cuerpo y fruta.
A las características del terreno se suman en su caso las condiciones climáticas, con una fuerte amplitud térmica entre el día y la noche, vientos constantes y poca lluvia, que facilitan una correcta maduración y calidad de la uva.
Su renovada imagen toma como referencia el vino principal de la gama, Valtravieso Crianza, y actúa a su vez como sello de calidad para el resto de sus vinos ribereños de parcela (Finca La Atalaya Reserva, VT Tinto Fino, VT Vendimia Seleccionada y Gran Valtravieso), así como para su vino de ensamblaje: Finca Santa María Roble.
Del total de 170 ha de viñedo que gestiona Valtravieso, 100 ha se ubican sobre un páramo.