Esta Garnacha es la búsqueda de un sueño, el de Gonzalo Celayeta, de ahí su nombre. Una quimera, el anhelo del enólogo de encontrar la mayor tipicidad y expresividad de una zona y su variedad. Y por el resultado que obtiene, se acerca bastante. Intensidad alta, en una Garnacha pura y dura, con una fruta roja viva, notas de pensamientos azules, tabaco inglés, sotobosque, y un fondo terroso y de arcilla húmeda. Boca amplia, con estructura, golosa, de trago largo y ancho, tanino maduro y muy buena acidez. Una Garnacha que explota y demuestra lo bien afinada en ánfora que está, dejando un largo y mineral final.